Después de que rubias y morenas tuviesen definidas sus tendencias de esta temporada en lo que a color de pelo se refiere con el scandi blonde, el chocolate cake y el strawberry brunette, les tocaba el turno a las pelirrojas. Para las melenas cobrizas y anaranjadas llega el llamado peach cobbler, la versión más dulce del pelirrojo. El cobbler es un postre tradicional de Estados Unidos y Reino Unido que consta de fruta sobre un rebozado. De esta dulce comida, de los melocotones y del color de las mismas toma el nombre una nueva tendencia en color de cabello. Ha sido el conocido estilista y peluquero de las celebrities Chad Kenyon el que ha acuñado este término.
Este tono es una especie de híbrido entre el cabello rubio y el pelirrojo, que se conforma creando un degradado que va desde raíces a puntas con tonos anaranjados, cálidos ciertamente pastel y también rosados, logrando un efecto muy natural.
https://www.instagram.com/p/BwDK7iTAfyl/ Según ha relatado a la revista Allure, Chad se inspiró en una de sus clientes habituales para crear este tono. “Me pidió que enriqueciera su cabello con tonos doraos y cobrizos cálidos pero esta vez primero apliqué un tono rubio vainilla frío, después apliqué sombra en las raíces, luces y sombras y un gloss global por todo el cabello con tonos de melocotón y nuez moscada” explica el peluquero. El resultado de este proceso fue un look de aspecto muy natural y un crecimiento del cabello perfecto sin líneas de tinte marcadas. https://www.instagram.com/p/BwS_3erAOOr/ Este color de pelo, de aspecto balayage para pelirrojas, es perfecto para aquellas que cuenten con un tono de cabello pelirrojo natural pero también es una opción ideal para cabellos castaños o rubios que quieran cambiar de cara al verano y lograr un color cálido. Además, debido a la armonía del degradado y el tono cálido del color, es perfecto para afinar rasgos de la cara, aportar luz a la piel y dulcificar el rostro restando años de edad.