El día que Letizia fue la “invitada incómoda” a la boda de Mary y Federico de Dinamarca

Así fue vestida la reina Letizia a la boda de Mary de Dinamarca en 2004.

El día que Letizia fue la "invitada incómoda" a la boda de Mary y Federico de Dinamarca

getty

Mary de Dinamarca ha hecho historia como la primera reina de origen australiano tras la abdicación de la reina Margarita y la coronación de su esposo Federico (ahora rey Federico X). La pareja real danesa caminó al altar el 14 de mayo del 2004 en la catedral Vor Frue Kirke de Copenhague y se convirtió en una de las royal weddings más recordadas gracias a la unión del heredero con una “plebeya”. Como dictamina la tradición en las bodas reales, asistieron varios miembros de diferentes casas de la realeza, entre ellos los reyes de España —y habría sido Letizia quien destacó como la ‘invitada incómoda’ debido a su elección de vestido. ¿Quieres saber los detalles?

¿Cuándo se casaron Federico y Mary de Dinamarca?

Federico y Mary se comprometieron en octubre 2003 se conocieron en un bar durante los Juegos Olímpicos de Sydney en el 2000 y tuvieron una relación a larga distancia mientras ella trabajaba como tutora de inglés en París—. Él le entregó un anillo de compromiso con un diamante en corte esmeralda y dos baguettes de rubí en corte esmeralda.

El príncipe heredero y Mary Donaldson se casaron en la Catedral de Copenhague seguida por las festividades nupciales en el Palacio de Fredensborg.[6] Las hermanas de Mary, Jane Stephens y Patricia Bailey, y su amiga Amber Petty, fueron damas de honor, mientras que el hermano de Federico, el príncipe Joaquín de Dinamarca, fue el padrino. Las sobrinas de Mary, Erin y Kate Stephens, y Madisson Woods, fueron las niñas de las flores, y el sobrino de Federico, el príncipe Nikolai de Dinamarca, y el primo hermano una vez retirado, el conde Richard von Pfeil und Klein-Ellguth, fueron los pajes.

Mary llevó un vestido de novia creado por el diseñador de moda danés Uffe Frank con un velo utilizado por primera vez por la princesa Margarita de Suecia, y luego por su hija, la reina Ingrid de Dinamarca. El velo, hecho de encaje irlandés, fue usado más tarde por las hijas de Ingrid, Margrethe, Benedikte y Anne-Marie, así como por sus nietas, Alexia y Alexandra. ¡Esto hace que Mary sea la primera y única persona no nacida en la familia en llevar el velo! La tiara de novia de Mary fue un regalo de la reina Margarita y el Príncipe Henrik.

El día que Letizia fue la "invitada incómoda" a la boda de Mary y Federico de Dinamarca

Llegando a la cena ofrecida al Príncipe Federik y Mary Donaldson con motivo de su boda en Copenhague, Dinamarca, el 14 de mayo de 2004.

getty

¿Quiénes fueron a la boda de Mary de Dinamarca? Incluyendo a Letizia

La boda de los ahora reyes de Dinamarca tuvo múltiples invitados: entre las casas reales de Suecia (Victoria y Daniel Westling), de Noruega (los reyes Harald y Sonia, el príncipe hereredo Haakon y su esposa Mette Marit), de Bélgica (Felipe y Matilde), de Holanda (con Máxima y Guillermo), de España (Felipe VI y Letizia), el príncipe heredero de Japón, los [ex] condes de Wessex Sofía y Eduardo, los royals de Luxemburgo, Alberto y Carolina de Mónaco; y muchos, muchos diplomáticos.

El día que Letizia fue la "invitada incómoda" a la boda de Mary y Federico de Dinamarca

Príncipe Felipe y su prometida Letizia Ortiz Rocasolano llegan para asistir a la boda entre el Príncipe Heredero danés Frederik y Mary Donaldson en la Catedral de Copenhague el 14 de mayo de 2004 en Copenhague, Dinamarca. El romance comenzó en 2000 cuando Donaldson conoció al heredero de una de las monarquías más antiguas de Europa durante una reunión en los Juegos Olímpicos de Sídney, donde él estaba con el equipo de vela danés.

getty

A la fecha, el vestido rojo que llevó la reina Letizia sigue siendo uno de sus mejores looks a lo largo de los años. Fue un modelo del diseñador español Lorenzo Caprile: ceñido en el torso de crepé de seda, de cola larga con detalle de mangas semitransparentes ajustadas con escote Bardot, combinado con clutch con joyería y zapatos de Pura López (vía Mujer Hoy) con el que causó sensación desde su llegada. Las reglas casi no-oficiales de una boda dictamina que ninguna mujer debería ir vestida de rojo a una boda, ya que, presuntamente, representa pasión y erotismo (en la psicología del color) y esto podría ser una malinterpretación para querer llamar la atención en la boda. En aquel momento Letizia estaba a pocos días de caminar al altar con su propio príncipe azul (se casaron el 22 de mayo 2004), y las intenciones de la reina de España por elegir este color jamás se aclararon —pero tampoco tenían por qué alarmar en la royal wedding.

Editora digital de Harper’s Bazaar México. Escribo todo sobre moda, belleza celebridades y lifestyle, añadiendo mi ligera obsesión con la realeza y la historia.
TAMBIÉN TE VA A GUSTAR