En 2016 el cuento de hadas que vivía la familia Pitt Jolie llegó a su fin tras un escandaloso incidente de violencia sobre un jet privado en el que, según declaraciones de Angelina Jolie, el protagonista de Troya se encontraba bajo los efectos del alcohol y la agredió física y psicológicamente, así como a uno de los hijos que tienen en común.
Al aterrizar, Angelina Jolie tomó la decisión de ponerle punto final al matrimonio y no volver nunca más con Brad Pitt, por lo que le solicitó inmediatamente el divorcio y conforme crecieron, los hijos de ambos decidieron retirarse el apellido paterno algunos incluso de manera legal, para dejar clara la postura y reiterar el alejamiento del actor y sus abuelos.
Tras ocho largos años de tribunales y litigios, Brangelina ha llegado a su final definitivo mediante un acuerdo firmado por ambos, así lo anunció James Simon, el representante legal de Angelina Jolie, quien además ha regresado triunfalmente a la pantalla grande con el estreno de Maria y se perfila como una de las películas favoritas rumbo al Óscar.
De acuerdo con el Daily Mail, Inés De Ramón, actual pareja de Brad Pitt habría sido una pieza clave para firmar el acuerdo de divorcio debido a que la diseñadora y modelo puso como ultimátum a Brad Pitt cerrar definitivamente su anterior relación para formalizar la suya, pues al parecer ambos tienen planes de casarse inmediatamente después de que Brad Pitt sea oficialmente soltero.
Brad quiere casarse de nuevo, pero Angie sigue impidiéndole que se case. Él solo quiere que se acabe.