La reina Isabel II falleció en su hogar escocés de Balmoral un 8 de septiembre de 2022. La monarca poseía una hermosa colección de joyas —uno de los archivos más caros y más grandes del mundo hasta la fecha—, yesde su fallecimiento surgieron preguntas sobre el futuro de las joyas, muchas de las cuales permanecen en exhibición pública en la Torre de Londres y la otra mitad la recibieron miembros de la familia real (como las joyas de la reina Isabel II que Camilla heredó). Sin embargo, Isabel II fue enterrada con algunas de sus piezas personales más valiosas, dentro del lugar de descanso final de la monarca siendo la capilla conmemorativa del rey Jorge VI, ubicada en la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor.
¿Qué pasó con las joyas de la reina Isabel II?
Lisa Levinson, directora de comunicaciones del Consejo de Diamantes Naturales, dijo a Metro, “Su Majestad es una mujer increíblemente humilde de corazón, que probablemente sólo lleve su anillo de bodas de oro galés y un par de pendientes de perlas para descansar”. Precisamente estas dos piezas serían las que están junto a la monarca, que en paz descanse.
- Anillo de bodas de oro galés: el anillo de bodas de una sola pieza de oro galés puro de la mina Clogau St. David pertenecía a la Reina Madre cuando se casó con el rey Jorge VI en 1923 y luego se lo regalaron a Isabel cuando se casó con el príncipe Felipe en 1947. La reina lo usó cada día y se rumorea que está inscrito con un mensaje secreto del difunto duque de Edimburgo.
- Aretes de perlas: un elemento básico del joyero de la reina, los aretes eran tan queridos por Su Majestad que se esforzó por regalar un par a todas las mujeres de la Familia Real. Siguiendo una tradición establecida por la reina Victoria, las perlas se consideraban joyas apropiadas para el luto en la realeza británica, pero Isabel II las usaba con frecuencia y podrían haberse convertido en un símbolo personal de dignidad y elegancia para ella. Hablando de esta pieza, lee sobre la desconocida perla mexicana que la reina Isabel II tenía entre su joyería.
Los deseos exactos de la reina Isabel II sobre sus joyas de entierro son privados, pero los expertos creen que fue enterrada con estas dos emblemáticas piezas simples que usaba con frecuencia. No te vayas sin leer: Isabel II y la princesa Margarita: dos hermanas que vestían igual más allá de la infancia.