Con la visita de los emperadores de Japón a Inglaterra, surge interés por conocer más sobre la familia del emperador Naruhito y su esposa Masako, quienes son padres de una sola hija que desafortunadamente no puede subir al trono por ser mujer. La vida de la princesa Aiko de Japón no ha pasado del todo desapercibida, con tan solo 22 años los medios siguen interesada en ella gracias a su posición en la Casa Imperial y, al mismo tiempo, por la adversidad que el destino le ha puesto a ella y su familia al terminar el linaje con ella.
¿Quién es la princesa japonesa?
Aiko de Japón, la princesa Toshi (significa ‘una persona que respeta a otros’), tiene 22 años y es la única hija del emperador Naruhito y Masako. El título imperial no le evitó que sufriera de bullying en la primaria, pero sobrepasando estas desventuras asistió un verano al colegio privado en Eton (donde previamente estudiaron los príncipes William y Harry) y se graduó de la Universidad de Gakushuin en Kengua y Iiteratura Japonesas.
La gran depresión de su madre Masako
En 2001, la princesa Masako —se casó con el emperador el 9 de junio de 1993— dio a luz a su primera y única hija a los 37 años de edad. Estas noticias llegaron después de que se supiera que atravesó un aborto espontáneo a los 18 meses. Su esposo culparía al estrés que generó la prensa, diciendo que la cobertura periodística era “verdaderamente deplorable” y que “espero que en el futuro estas cuestiones se traten de forma más prudente y considerada” (vía la BBC).
Poco después, en 2004, la casa imperial confirmó que Masako sufrió de una depresión por estrés que la mantuvo fuera de la agenda pública. Medios señalaban que se debía a la presión que enfrentó por dar a luz a un varón —y cuando supieron que nació una niña que no podría subir al trono debido a la ley sálica, los años venideros la dejaron intranquila.
En 2020, durante la pandemia y su cumpleaños 60, Naruhito confirmó que su esposa aún tenía “altibajos” y que “su fatiga tiende a prolongarse después de un gran evento o varios compromisos públicos”. Aclaró ante la prensa que Masako “seguía recuperándose”, aludiendo aún a su padecimiento por depresión (vía Vanity Fair España).
Aiko de Japón nunca podría ser emperatriz debido a la ley sálica
De acuerdo con la BBC, ninguna mujer ha ocupado el trono del Crisantemo desde que se prohibió a mediados del siglo XIX, que excluye a la mujer en la línea de sucesión. Tras el nacimiento de Aiko, siquiera se consideró poder cambiar esta ley, pero nunca hubo frutos para revertirla.
Y menos sabiendo que nacía un familiar varón que podría ser heredero. El hermano menor del emperador Naruhito, Fumihito de Akishino, es actualmente el primer en línea de sucesión; a él le sigue su hijo Hisahito (17). Fumihito tiene otras dos hijas, Mako y Kako —fue Mako, la querida prima de la princesa Aiko, quien renunció a sus bienes imperiales al casarse con un plebeyo (Kei Komuro, a quien conoció en la universidad).
#NEW The Imperial Household Agency has released new portraits of Princess Aiko, The Princess Toshi in occasion of her 22nd birthday today! 🇯🇵 pic.twitter.com/KGHh0670gF
— CoutureAndRoyals (@CoutureRoyals) December 1, 2023