Steve Jobs, el fundador de Apple, murió hace una década de cáncer de páncreas. Hoy, a 10 años de su partida, recordamos un poco de su vida y de su legado.
Steve Jobs y Apple
El multimillonario murió el 5 de octubre de 2011. No podemos obviar su primera y gran aportación y al mundo: Apple. La marca ha cambiado la forma de relacionarnos con la tecnología y con la humanidad, en general. Tim Cook ha multiplicado la marca de manera exponencial. Las acciones de la dinastía iPhone, iPad y Mac se vendían a casi 14 dólares a la muerte de Jobs y hoy están valoradas en 142,65 (diez veces más). Las generaciones de su genealogía tecnológica siguen llegando y las colas en las tiendas son cada vez mayores.
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Sus relaciones personales
Steve tuvo cuatro hijos de dos mujeres distintas, la fortuna de 10.200 millones de dólares que dejó a su viuda, Laurene Powell Jobs, está valorada hoy en 20.900 millones de dólares. Es decir, se ha duplicado, lo cual quiere decir que ha crecido a un ritmo cinco veces menor que la compañía. Laurene Powell Jobs está dentro de las 100 personas más ricas del planeta.
“No estoy interesada en construir sobre el legado de una herencia y mis hijos lo saben. Tampoco Steve estaba interesado en eso. Así que el dinero, si vivo lo suficiente, se acaba conmigo”, sentenció Powell Jobs.
El mensaje es claro: que se ganaran el pan con el sudor de su frente. A sus 57 años anunció que invertiría 3.600 millones de dólares en la lucha contra el cambio climático. Sus otras causas han sido las políticas migratorias y la lucha contra el cáncer, a través de la Emerson Collective.
Sus hijos...
Reed, el único hijo varón de Steve, estudió Oncología en Stanford y trabaja en Emerson Collective. Es de perfil mediático nulo. La menor del clan Jobs, Eve Jobs, acaba de debutar como modelo para la firma Coperni en la última Semana de la Moda de París a sus 23 años, compartiendo pasarela con Gigi Hadid y otras modelos ya consolidadas.
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La más discreta de todas, Erin Siena, de 25 años, estudió arquitectura y diseño y de la que apenas sabemos algo. La hija pródiga y primogénita Lisa Brennan-Jobs, de 43, que durante sus primeros años de vida fue negada por su padre. Su libro ‘Small fry’, publicado en 2018, contaba con todo lujo de detalles su relación con un padre inicialmente ausente pero con el que acabó teniendo una estrecha (aunque tormentosa) relación.
Lisa fue fruto de la relación con su novia de juventud, la pintora Chrisann Brennan y sí fue incluida en la herencia a modo de acto de redención de su padre. Cumplió su sueño de ser escritora e intelectual. Sigue leyendo...
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