Después de anunciar su tercer divorcio, Charles Spencer afirma que queda “inmensamente triste” al despedirse del matrimonio que tuvo con Karen Gordon (una filántropa canadiense que conoció en una cita a ciegas) pero la vida ahora tendrá un nuevo rumbo. Queda claro que el interés por el historial amoroso del hermano de la princesa Diana está por los cielos, pero si hubiese una mujer que necesita contar su propia historia sería la primera esposa: Victoria Lockwood (59), ex modelo británica que le dio a Charles tres hijas dignas del estilo de Lady Di.
Victoria Aitken en sus inicios
Nacida como Catherine Victoria Lockwood en Windsor, sus padres fueron John Lockwood (un ejecutivo de aerolíneas) y Jean Holt. Su hermano Christopher Lockwood es periodista y experto en política. De la vida privada y hasta pública de Victoria se sabe poco, más que como modelo figuró en varias pasarelas y portadas de revista —tiene una imagen capturada por el afamado fotógrafo italiano Paolo Roversi, a lo que una usuaria ha comentado al respecto, "¡gracias por revivir esto! Nunca lo había visto... He estado pasando por una “fase de Victoria Lockwood” desde que vi los anuncios de Comme des Garçons hace algunas semanas; ella era hermosa, tan atemporal y serena”.
Boda a las semanas de conocerse
Charles, en calidad del 9° conde Spencer y hermano de la famosa princesa Diana, claramente tenía un lente puesto en el interés de los medios y de cualquier seguidor de la realeza. Por un rato, el soltero de oro, hasta que decidió caminar hacia el altar con una Victoria Lockwood, lanzando la propuesta con un anillo de brillantes —tenían seis semanas de conocerse.
La boda se celebró el 16 de septiembre de 1989 en la iglesia de St Mary, en Northamptonshire. Su anillo de compromiso era un anillo antiguo de diamantes y rubíes en forma de corazón con una corona en la parte superior, los pendientes eran rubíes a juego rodeados de diamantes. El vestido de novia tenía 15 metros de encaje, 10 metros de seda y estaba recubierto con encaje de hilo de oro, adornado con piel de sable rusa.
Victoria dijo a HELLO en 1998: “Yo diseñé mi vestido de novia. Garabateé el diseño básico y se lo di a Tomasz Starzewski, quien era bastante desconocido en ese momento. Conocí a Tomasz cuando estaba modelando para él y le pedí, como amigo, que hiciera mi vestido. Sabía que quería algo muy romántico con un aire de época. Eligió la tela dorada porque no pudimos conseguir lo que yo quería, que era encaje francés en blanco roto”.
Y aunque el vestido de novia y la joyería cumplieron lo suficiente para causar impacto, el toque final inigualable fue la tiara Spencer, misma que usó la princesa Diana el día de su boda con el entonces príncipe Carlos en 1981. Por si fuera poco, la propia Diana asistió a la boda (sin Carlos) con un vestido midi en gris platinado y una pamela a juego. El príncipe Harry, de cinco años, fue uno de los pajes.
Hijos, divorcio, segundas nupcias y adicciones
Un año después de la boda, nació su primera hija, Lady Kitty Spencer (ahora casada con un hombre 32 años mayor que ella); siguieron las gemelas Eliza y Amelia Spencer, y finalmente un hijo varón de nombre Louis Spencer, aparente heredero del condado.
Lejos del cuento de hadas, hubo reportes de que Victoria sufrió de problemas alimenticios, adicción y alcoholismo en el primer año de su matrimonio. A los seis meses de casadas, informaron que Charles Spencer habría tenido un amorío con una periodista —y Victoria habló sobre ello años después, cuando tenía 43. “De la noche a la mañana me convirtió de una madre primeriza profundamente contenta, en una mujer herida, asustada y devastada”, reveló a HELLO. De hecho, relacionó estos disturbios con los de la princesa Diana: “creo que Diana y yo tenemos un poco en común con nuestros desórdenes alimenticios y matrimonios rotos, ella era compasiva”. Kitty, entonces de 17 años, diría al medio que sus papás le dijeron que “no se amaban más entre ellos, pero que a mí aún me amaban”.
En 2005, Victoria le dio una segunda oportunidad al amor y se casó con el empresario Jonathan Aitken, y producto de este matrimonio nació Samuel Aitken (2003). Pero los inconvenientes no terminaron ahí, ya que Jonathan inculparía a Victoria de haberle sido infiel con un ex soldado británico de nombre Clinch. Según documentos presentados al Tribunal Superior de Sudáfrica, Aitken acusaba a Clinch de terminar con su matrimonio mientras éste solicitó una orden de restricción contra él —mientras, Aitken presentaría una sustanciosa suma de dinero para compensar “la pérdida de afecto, consuelo, compañía y servicios de Victoria”. Ante el juez, un amigo de Victoria mencionaría, “su relación con el señor Clinch no comenzó sino hasta después de que Jonathan Aitken se había mudado de la casa conyugal y habían iniciado los procedimientos de divorcio”.
Ahora Victoria, con un perfil bajo, está más que alejada de la familia Spencer, aún conservando el recuerdo de haber sido una novia en posesión de la tiara de la princesa Diana.