Desde su comienzo en el 2011, “Game Of Thrones” ha marcado a una generación completa, ha sido fuente de inspiración (en muchos sentidos) y también nos ha desconectado de la vida real para llevarnos a un mundo de fantasía. Cuando nos referimos a esta serie, es imposible no mencionar lo fascinante que es el mundo que contempla, los personales, los diálogos, la producción, su trama... su vestuario, uno de nuestros puntos favoritos y que temporada tras temporada nos ha atrapado e incluso ha servido de inspiración para el mundo de la moda. Velvet, pieles, brocados, capas, colores sobrios, siluetas definidas y muchas más texturas, materiales y accesorios, son los responsables de que el vestuario de GOT sea toda una complacencia a la vista, y lo cual es posible gracias al trabajo de la diseñadora de vestuario británica Michele Clapton. Pero no solo eso, ella hace posible que cada personaje se vea definido con un estilo único que no se ve estancado en ninguna temporada, y que incluso ha ido evolucionando de una manera casi mágica, siguiendo además el arco dramático de cada personaje, desde Daenerys Targarien hasta Sansa Stark, no tenemos duda de ello. Con base en los anterior, analizamos esa evolución que ha ido persiguiendo a algunos de los personajes principales, algo sumamente importante en la trama y narración, pues recordemos que una prenda, un look completo, una textura o cualquier cosa que tenga que ver con la indumentaria de una persona, en este caso, de un personaje, comunica más de lo que podemos pensar.
Daenerys Targarien
En la temporada 1, la caracterizaba un aire inocente y puro que con el paso del tiempo se fue esfumando de manera periódica, vestidos sutiles, vaporosos y colores templados eran sus prendas predilectas, los cuales tuvo que cambiar en algún momento por las pieles que Khal Drogo le proporcionó al casarse con ella, para después, volver a adquirir sus vestidos pero esta vez un poco más estructurados y de telas más estáticas.
Lo mismo ocurrió con su peinado, en las primeras temporadas, lucía un pelo más frágil y peinados más “desenfadados”, pero con el paso del tiempo su posición la hizo caracterizarse con las y variadas trenzas, fuertes y que la hacían lucir más segura de si misma. El caso de Daenerys Targarien es sumamente interesante y es uno de los arcos dramáticos de la serie más marcados, pasó de ser una niña tímida a “La Madre de Dragones”... pasó de usar vestidos vaporosos ha incluso llevar armadura.
Sansa Stark
Después de Daenerys Targarien, Sansa Stark es sin duda alguna, otro de los cambios más radicales de la serie en todo sentido: en la temporada 1, Sansa comienza como la niña mimada y superficial del Norte, protegida por su familia, era una niña sumisa que añoraba con convertirse en reina.
Pero su futuro y vida cambió de repente, y comenzó a ver la realidad del mundo. Entre sus primeros vestuarios la recordamos con vestidos conservadores, ultra femeninos y que emulaban una personalidad introvertida e ignorante de su exterior. Lo cual cambió con el paso de las temporadas, de hecho en la 7, su vestuario se define por llevar pieles, terciopelos, capas pero lo más interesante es que en colores oscuros, definiendo una personalidad fría, calculadora y poderosa: Lady of Winterfell.
Cersei Lannister
Odiada pero amada a la vez, es un personaje que a lo largo de la serie se ha mantenido en una postura totalmente definitiva por su carácter tenaz y fidelidad a si misma, y su vestuario dice mucho de ello. Incluso en una entrevista reciente, Michele Clapton declaró que en la temporada 8, Cersei sigue siendo el personaje más leal con su personalidad.
En las primeras temporadas, la indumentaria de Cersei era definida por vestidos con mangas amplias, faldas largas y con un color en especial: rojo, el cual indicaba una señal de poder y sensualidad, que fue fortalecida mucho más, aún después de la pérdida de sus hijos y su humillación pública, lo cual la llevo a dejar atrás su cabellera larga dorada y a la vez comenzar a usar prendas oscuras y más minimalistas.
Arya Stark
Siempre opuesta a su hermana Sansa, Arya siempre denotó un espíritu guerrero que rompía paradigmas. Peleaba, se defendía y luchaba para sobrevivir, y lo hizo (hasta el momento). Desde la primera temporada, ella no usaba vestidos, de hecho, se inclinaba por pantalones y chalecos de cuero con los que se hacía notar como una guerrera valiente.
Gracias a eso el personaje fue creciendo y lentamente se convirtió en una niña 100% segura de si misma y sin miedo a nada, y eso se nota a simple vista en su indumentaria que en cada temporada se muestra sobria, firme y estructurada.
GOT: la inspiración en el mundo de la moda
Luego de 8 años, Game Of Thrones se convirtió en una de las series más aplaudidas del mundo en todos los aspectos, uno de ellos, como mencionamos al principio, fue la industria de la moda, para comenzar, las alfombras rojas y es que en diversas ocasiones vimos a algunas celebridades en vestidos y looks que nos trasladaban al universo de GOT, la más reciente: la propia Emilia Clarke en la Premiere de la última temporada de la serie, quien en un Valentino nos hizo creer tener una señal sobre el final de GOT. Pero no solo se queda ahí, en las pasarelas también se hizo presente la inspiración de Game Of Thrones, ¿cómo olvidar? la vez que Elie Saab presentó una colección Haute Couture inspirada en la serie, incluyendo entre sus looks, el característico velvet, pieles, estolas y capas que vimos llevar un par de veces a varios personajes. Ahora, solo nos queda esperar lo que veremos en la última temporada, y estamos listos para contemplar los vestuarios que esta vez llevaran nuestros personajes favoritos. VER TAMBIÉN: El look de Emilia Clarke que podría revelar el final de “Game Of Thrones”
