Cuando las cosas van mal, ¿quién no desea hacer las maletas, dejarlo todo atrás y viajar por el mundo? Así como lo hizo la protagonista de Comer, Rezar, Amar. Este 2020 se cumplen 10 años de que se estrenó la película, basada en el libro homónimo de Elizabeth Gilbert, y dirigida por Ryan Murphy. Protagonizada por Julia Roberts, la historia nos muestra cuán importante es mantener los pies en la tierra y asimilar que las cosas van a llegar a su debido momento. En este instante (y casi todo el tiempo), la vida pareciera que nos pone a prueba, son tantos los retos que anhelamos salir de lo cotidiano para huir. Y ese deseo de escapar nos conecta con la protagonista de la cinta, así como algunas de las lecciones que aprendió durante su recorrido en Comer, Rezar, Amar.
Sobre el equilibrio
“Algunas veces, perder el equilibrio por amor, es parte de vivir una vida equilibrada”.
“Viajaste por el mundo tratando de encontrar el equilibrio. ¿Y el equilibrio que crees haber encontrado es… qué? Meditar por 20 minutos e ir a ver a un viejo curandero. Escucha querida, el balance es no dejar que nadie te ame menos de lo que tú te amas a ti”.
Sobre el cambio
“Todos queremos que las cosas permanezcan igual. Nos conformamos por vivir en la miseria porque tenemos miedo al cambio, de que las cosas se reduzcan a no menos que en ruinas”.
“Sé que te sientes mal. Pero tu vida está cambiando. Eso no es algo malo”.
Sobre tus pensamientos
“Tienes que aprender a seleccionar tus pensamientos de la manera que escoges tu ropa todos los días. Esa es una habilidad que puedes cultivar. Quieres venir aquí y deseas tanto el controlar tu vida. Mejor trabaja en tu mente, es la única cosa que debes de controlar. Si no puedes controlar tus pensamientos, estás en problemas. Tu problema es tratar, ¡deja de tratar! Ríndete”.
Sobre la soledad
“Hasta que estés cómodo estando solo, no te darás cuenta de si estás escogiendo estar con alguien por amor o por soledad”.
Sobre la compañía
“No quiero que me salves. Quiero que estés a mi lado mientras me salvo a mí misma”.
Sobre las rupturas amorosas
“Algunas veces, nuestros corazones se rompen para permitir que nueva luz ingrese”.
Sobre la familia
“Todo se derrumba, querida. Lo única cosa permanente en la vida, es la familia”.
Sobre soltar
“Algunas veces debemos de dejar de analizar el pasado, dejar de planear el futuro, parar de tratar de precisar exactamente cómo nos sentimos, parar de decir exactamente lo que queremos y simplemente ver qué pasa”.
Sobre sanar
“La única forma de sanar es confiando; un corazón roto significa que has intentado algo”.