La tenista volvió causar polémica respecto a su vestimenta y rompió el “código de vestimenta”... Jamás un Grand Slam había estado tan ligado a al mundo de la moda como el US Open, ¿la responsable? claro está: Serena Williams, quien además de sus dotes con la raqueta y su trabajo diario para ser la número uno también ha demostrado que sabe responder en la pista a quiénes critican sus estilismos. En 2004 rompió esquemas al competir en el US Open con un uniforme conformado por una falda denim y t-shirt con tachuelas, luego optó por un mono negro de licra inspirado en “Black Panther” para su regreso a las pistas tras ser madre, en Roland Garros 2018, una elección criticada por la Federación Francesa de Tenis por considerar que “no era apropiado”. Así como (mejor) respuesta, la tenista no dudó en mostrar su disconformidad y dar un golpe sobre la mesa está vez eligiendo un tutú negro diseñado por Virgil Abloh para su primer partido del US Open, un diseño en el que ella ha tenido mucho que ver y que forma parte de la colección Queen de Nike.
Pero las reivindicaciones no iban a quedarse ahí y en su segundo enfrentamiento del campeonato, Serena también quiso lucir un tutú, al más puro estilo bailarina, esta vez de color morado y también en conjunto con Abloh. “Hacemos diseños para mujeres que se sienten seguras o que no están necesariamente seguras ese día pero que quieren estarlo, y entonces se ponen nuestra ropa”, confesó a un importante portal de moda.
https://www.instagram.com/p/BnGq5mRFj_v/?hl=es-la&taken-by=serenawilliams Hasta el momento no sabemos si Serena continuará sorprendiendo con piezas especiales y originales para sus estilismos que la caracterizan en lo que mejor sabe hacer, sin embargo hay algo más que debemos reconocer: agradecemos que la tenista lucha por sus derechos y reivindica el papel de las madres trabajadoras. Un mensaje a través de la moda.