Si esta temporada te invitaron a una boda, bautizo, primera comunión o graduación y entraste en pánico, calma, porque aquí tenemos una decena de tips que te van a salvar de cualquier evento. Es bastante probable que la historia te resulte familiar: llega cierta temporada en la que ya tienes sobre la mesa, las invitaciones para acudir a tres bodas, un bautizo y dos comuniones y, aunque al principio piensas eso “uff, aún queda mucho para ponerse a pensar en cómo ir vestida”, te plantas una semana antes del primer evento y entras en pánico porque no sabes qué ponerte. Drama. Muchas veces la falta de tiempo (y de ganas) para montar los looks hace que termines llevando lo primero que encuentres y que, con el paso de los años, prefieras guardar esas fotos que hiciste en la fiesta en cuestión en una carpeta de tu ordenador de nombre indescifrable. Sí, todos hemos estado en esa circunstancia y te entendemos más de lo que crees.
Por eso, en nuestra infinita misericordia, hemos decidido componer un decálogo para convertirte en la invitada perfecta. Y hay consejos que vas a poner en práctica el resto de tu vida (como el de que nunca irás mal vestida con un vestido cruzado) y otros con los que llevarás tendencias que han pisado las pasarelas en los últimos meses a esos eventos. De nada.
Brillibrilli para el día y la noche
Históricamente concebidos como atavíos de los eventos más nocturnos, el glitter y las lentejuelas buscan su espacio en las invitadas de las fiestas diurnas. La clave está, claro, en elegir bien el tipo de brillos que llevar. Mientras por la mañana lo ideal sería optar por vestidos o conjuntos en tonos más soft (como el crema, el rosa palo o el azul bebé), por la noche lo ideal sería elegir aquellos otros más saturados (fucsias, dorados o rojos).
Un bolso limosnera sigue siendo la opción más acertada
En las últimas fiestas ya habrás llevado carteras de mano (tanto minimal como de tipo joya), bolsos de asa y hasta con forma de caja. Este año, sin embargo, la limosnera se impone como complemento a lucir en todo evento. Y es que no hay una mejor forma de guardar todo lo que necesitas (que si el zapato plano para la fiesta posterior, el maquillaje para retocarse de vez en cuando, un par de gomas para el pelo, el móvil, las llaves, la cartera...) que con un accesorio como este.
Lazos, lazos everywhere
Hasta hace relativamente poco tiempo símbolo inequívoco de lo naíf, lo hortera y hasta lo kitsch, el lazo ha tornado en el mejor ornamento de chaquetas, blusas y vestidos. ¿Los lugares clave para situarlos? El pecho, las hombreras o en la nuca y a modo de broche de oro de un vestido con escote en la espalda considerable. Eso sí, cuanto más grandes y exagerados, mejor.
Sombreros (y pamelas) de ala ancha: tres veces sí
A juzgar por lo visto en las pasarelas, la invitada de las ceremonias de mañana no se va a quitar el sombrero. Y lo hacen por todo lo alto. Así, Chanel se decanta por modelos fabricados con rafia natural; Valentino opta por su versión más lady; Ryan Lo lo apuesta todo a los de tipo bruja (en un acercamiento al Sombrero Seleccionador de Hogwarts), mientras que Erdem le añade un toque romántico añadiendo un velo de tul negro. Total, que da igual su forma, su textura o el material con el que se fabriquen, ya que ahora lo único relevante es que su ancho rebase del de los hombros. El tamaño sí importa.
Los conjuntos de top y pantalón ganan adeptas
Y es que, pensando en su practicidad, son las prendas más fáciles de reciclar d.E. (después del evento). Esta temporada se llevan la palma los tops asimétricos, aquellos que juegan a ser vestidos y que se combinan con pantalones ligeramente acampanados, como ocurre en las propuestas de la línea de fiesta de Zara.
Tacón asequible, siempre
Porque cuando el reloj toque las cuatro de la madrugada tus pies te lo agradecerán. En la era de la comodidad, apostar por zapatos con tacones de más de ocho centímetros resulta superfluo. Y, no, no te diremos que te tires a la piscina con unos sneakers, como sí lo hizo Serena Williams en la Gala MET, sino que te recomendamos apostar por aquellos con tacones con forma rectangular (o geométricos), anchos y casi planos. About Arianne, Yuul Yie o Laurence Dacade son tres marcas a tener (muy) en cuenta.
Si no sabes qué llevar, hazte con un vestido cruzado
Básico entre básicos para invitada. Desde hace dos veranos el wrap dress (real o a modo de trampantojo) se han impuesto como el hit máximo de eventos de lo más variopinto. ¿El secreto para apostar por él y triunfar? Optar por aquellos con estampado de lunares, tonos lisos como el rojo, el amarillo o el naranja (la triple alianza fashion de la temporada) y confeccionados en materiales como el raso o el satén, especialmente para la noche.
El esmoquin
Ya lo llevó Sarah Jessica Parker cuando en la segunda película de Sexo en Nueva York(ALERTA, SPOILER) hizo las veces de ‘padrina’ en la boda de su amigo Stanford Blatch. Y desde entonces solo las fashionistas más atrevidas habían osado a dar el paso y versionarlo en las fiestas más top.
La última temporada de red carpets ha demostrado que el esmoquin con pajarita es una opción igual de viable que la del histórico little black dress. Judy Greer, Emily Blunt o Marta Sango son algunas de las que ya han apostado por esta rupturas de barreras entre lo masculino y lo femenino. Eso sí, para darle un toque más cool, súmale un bolso de tipo joya (¿qué tal una limosnera?) y una sandalia de tacón que se deje ver entre el pantalón. Acierto total.
El animal print... a todas horas
La tendencia más salvaje de los últimos meses se reinventa (otra vez). Y el secreto para lucirlo en los eventos y no morir en el intento es optar por aquellas prendas con patrones simples, con siluetas rectas o de tipo capa y combinarlas con accesorios que no caigan en el exceso ni en el histrionismo. ¡Ya vas a tener suficiente con el motivo!
El poder de la manga
Ante la duda sobre tu look de invitada, un vestido minimal con manga potente. Desde hace unos años el street style aplaude aquellos estilismos en los que abundan las mangas diferentes, ya sea por su volumen, por sus cut outs o por estar decoradas con todo tipo de lazos, tachuelas, flecos o parches. Y es que esta es la opción perfecta cuando quieres enfundarte un vestido con un patrón simple pero que tenga algo de rollo. Las influencers más seguidas ya les han dado su bendición en forma de post.
VER ENTRADA: ¿Y si la inspiración para tu ‘look’ de invitada estuviera en Netflix?