Llevar el vestido ideal y más favorecedor el día de tu boda es uno de los objetivos más retadores en una fecha tan especial, todas las mujeres que sueñas con ese día han pensado en el diseño que les gustaría llevar para dar el sí frente al altar y es que el elemento que más llama la atención del festejo seguido del lugar y la comida con la que los novios comparten su unión eterna con los invitados.
¿El vestido de novia es algo por lo que te debes preocupar? Sí, claro que sí. Para ello es importante estar atenta a las tendencias actuales que sugieren que ya no es tradición llevar diseños como el de la princesa Diana de Gales cuando se casó con el ahora rey Carlos III en los 80’s. Seguramente recuerdas un vestido dramático y opulento donde el exceso fue el protagonista y en aquel momento fue top por sus mangas abullonadas, faldas enormes, encajes, bordados, brillos y una cola larguísima con velo que actualmente ya casi no se utiliza.
Con esto no queremos decir nada más que las tendencias cambian y hay otras celebridades que han preferido llevar diseños mucho más discretos y estructurados propios del minimalismo vigente y el lujo silencioso que sigue vigente —y probablemente lo estará algunas temporadas más—, como es el caso de Carolina Herrera quien se casó con Reinaldo Herrera en 1968, 13 años antes que Lady Di y Carlos III.
La diferencia es que la tendencia que propuso entonces Carolina Herrera es la que actualmente prefieren las novias contemporáneas: siluetas y segundas pieles que enmarquen la figura, cinturones y escotes que delineen y realcen la parte media y superior del cuerpo y, además, permitan lucir accesorios y peinados focalizando ahí la atención del look nupcial.
La tendencia en vestidos de novia que predijo Carolina Herrera
Durante la celebración de su matrimonio con Reinaldo Herrera, quien falleció el pasado 18 de marzo, Carolina Herrera llevó un vestido corto con cuello y cuerpo con flores bordadas. El diseño de manga corta y entallado por un cinturón se convirtió en pionero de los looks nupciales discretos y minimalistas que hoy prefieren las novias.
