Un diseño icónico, una misma mujer, “Cuatro bodas y un funeral”, 25 años después...
No tenemos duda que hay personas por las que el tiempo no pasa y ahora que la nostalgia está en tendencia, alucinamos por momentos con todo lo que se está poniendo de moda de nuevo. Una de las décadas más memorables sin duda son los 90, los cuales no hacen falta decir están más vivos que nunca y por eso tenemos en nuestros días secuelas de películas tan míticas como “Cuatro bodas y un funeral”.
Protagonizada por Hugh Grant y Andie MacDowell desde su estreno ha sido una fuente de inspiración infinita a la hora de vestirnos. Incluso hemos recurrido a sus ideas a la hora de acudir como invitada a una boda (o cuatro, las que hagan falta). Pero más allá de la gran pantalla, esta película también nos dejó estilismos inolvidables como el que Elizabeth Hurley (pareja de Grant en esa época) llevó al estreno que tuvo lugar en Londres en 1994.
En caso de que lo hayas olvidado (cosa que nos parece imposible), la actriz acudió con este vestido negro con espectacular escote y aberturas adornadas con imperdibles XL dorados de Versace.
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Siendo un diseño que quedó para la historia de la moda, la edición americana de Harper’s Bazaar quiso recuperar ese momento y le pidió a la actriz que se pusiera el vestido 25 años después. Fue así como la frase de que el tiempo no pasa por algunas personas, fue recalcada por Elizabeth Hurley.
“El vestido Pin de la colección Primavera Verano 1994 mezclaba la ropa de noche y los detalles punk de una manera que nunca se había hecho antes. Fue la celebración perfecta del cuerpo de la mujer y su sensualidad, una afirmación del empoderamiento de la mujer. @elizabethhurley1 luce el vestido #VersacePreFall19 en @harpersbazaarus, inspirado en su look de debut en la alfombra roja de 1994".
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El vestido es una modificación del que llevó en su momento, pero nos atreveríamos a decir que le queda incluso mejor ahora con 53 años que cuando se lo puso por primera vez con 28.
“Necesitaba con urgencia encontrar un vestido para el estreno de Hugh, y en esos días no tenía idea de moda. Recuerdo que fui a una oficina donde literalmente sacaron un vestido de una bolsa de plástico blanca. Me lo llevé a casa y me hice mi propio peinado y maquillaje, luchando con Hugh por el espejo”, declaró la actriz en la entrevista. Y así es como sigue haciendo historia.
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