Hay historias de prendas y prendas con historia. Algunas cuelgan sobre las perchas de los armarios. Otras, verdaderas piezas de excepción, están expuestas en museos de medio mundo. Bajo esta premisas, y con el único objetivo de lograr que tu estilo esté argumentado y cargado de referencias que han marcado un antes y un después en la moda, aquí tienes estas seis joyas únicas.
UN ‘SMOKING’ DE YVES SAINT LAURENT
La revolución llegó de la mano del diseñador argelino Yves Saint Laurent en su colección de otoño / invierno de 1966 incorporando esta prenda, hasta ese momento reservada para los hombres, al armario femenino. Desde entonces, iconos del S.XX en diferentes ámbitos han lucido este dúo de chaqueta y pantalón considerado la quintaesencia del buen gusto. La etiqueta black tie –reservada para eventos de alto copete– ha vestido a Bianca Jagger, Lauren Bacall o Liza Minelli. “Para una mujer, el esmoquin es una prenda indispensable con la que sentirse bien siempre”, aseguraba Saint Laurent. Hoy Alexa Chung, Victoria Beckham, Zendaya, Emma Stone, Jennifer Aniston o Angelina Jolie cruzan miradas con los fotógrafos que disparan hacia sus dos piezas. En negro, en blanco o combinado de varios colores, el ‘smoking’ siempre está invitado a la fiesta.
UNA CHAQUETA DE ‘TWEED’ DE CHANEL
La década de los 50 fue decisiva para la diseñadora Coco Chanel, que creaba dos de las piezas más emblemáticas de su maison. Por un lado el bolso 2.55, que como sabemos se llama así por el mes y el año en el que fue concebido. Por otro, la chaqueta de tweed o lana cardada, tejido descubierto por la creadora en un viaje a Inglaterra junto al Duque de Edimburgo en 1923. La líneas rectas y depuradas de esta prenda que Karl Lagerfeld convertiría en el icono, tras la muerte de la diseñadora, que conocemos en la actualidad. Tal es así que en 2012 el káiser lanzaba junto a la editorial Steidl el libro ‘The Little Black Jacket’ –la exposición itinerante mundial– donde 113 celebridades como Sarah Jessica Parker, Carine Roitfeld –nombrada directora creativa de la firma Karl Lagerfeld– Alexander Wang o Anna Wintourposaban fotografiados por él mismo con esta pieza que, en palabra de Ines de la Fressange: “es una joya casi bíblica”.
UNOS ZAPATOS ‘MARY JANE’ DE MANOLO BLAHNIK
El modelo ‘Campari’ del diseñador canario es una de esas piezas que por obra y gracia de Sexo en Nueva York volvió a la vida a principios de la década de los 2000. También conocidos como ‘Mary Jane’, la historia deja claro que fueron los Tudor en el S.XVI los primeros en llevarlo, al igual que las ‘flappers’ o Coco Chanel en la década de los años 20. En nuestro país los conocemos como ‘merceditas’, en referencia a que la mujer de Alfonso XIII los llevó el día de su boda. Volvieron en los 60 para acompañar a la minifalda de Mary Quant y a los vestidos ‘Línea A’ que impulsaban la moda con un nuevo ‘swing’ con Courregès, Paco Rabbane o Yves Saint Laurenta la cabeza. Sea como fuere, esta horma –similar al ‘stiletto’ o salón pero con una tira que se posa sobre el empeine del pie– continúa siendo una de los zapatos más codiciados por las ‘fashion insiders’ y, por supuesto, un básico en el que invertir. Será para siempre.
UN ‘TRENCH’ DE BURBERRY
La gabardina es la prenda más buscada en nuestro país y uno de los referentes de estilo más relevantes del último siglo. Aunque su origen –al igual que la mayoría de piezas que forman el armario– viene de las prendas militares; su evolución, por el contrario, de la mano de firmas como Burberry, Alexander McQueen, Bottega Veneta o Loewe, ha traído consigo nuevas propuestas de tejidos y variantes que consolidan el ‘trench’ como una de las piezas que deberías tener.
UN ‘CARRÉ' DE HERMÈS
“El carré es un objeto perfectamente confeccionado, autónomo y autosuficiente”, comentaba Pierre-Alexis Dumas, nieto del creador y actual director artístico de Hermès, a Harper’s Bazaar al hablarnos de la historia de esta icónica pieza de seda creada por su abuelo en 1937. Más de 1.500 diseños tejidos a sus espaldas son claro ejemplo de la versatilidad creativa que la exquisita seda de Hermès. Su uso se ha ido ampliando a lo largo de la historia –rebajando su carga estilística como accesorio para proteger el cuello– para convertirse en uno de los accesorios con más posibilidades del armario. Es fácil verlo sobre el pelo a modo de diadema, decorando una coleta o una trenza o cómo si fuera un turbante. Además coquetear con la joyería en la muñeca como si fuera una pulsera o llevado como un cinturón. Las posibilidades son infinitas y Hermès es la opción más exclusiva para comenzar a jugar con la seda.
UN PANTALÓN VAQUERO ‘LEVI’S 501'
Es el tejido más democratizado de la moda. Su impecable azul índigo –que le sirvió para ser bautizado como ‘Blue Jean'– domina el armario desde su creación. Pero hay un modelo el modelo ‘501' de Levi’s es uno de los iconos del S.XX que está expuesto en el MOMA de Nueva York compartiendo protagonismo con obras de arte de Rothko o Andy Warhol. En la actualidad el ‘denim’ es la estrella de todo tipo de estilismos, su manual de uso y sus siluetas van variando: desde el corte ‘Boyfriend’ al corte ‘Mom’pasando por el pitillo o el talle alto. Puede que tengas uno o mil vaqueros pero siempre sientan bien.