Las hermanas Hadid, Bella y Gigi forman parte del top 5 de las modelos internacionales más exitosas y mejor pagadas del momento gracias a su espectacular silueta y el talento nato para posar ante una cámara o caminar sobre una pasarela.
La nueva campaña de Miu Miu demuestra porque Gigi Hadid es una de las perchas más exclusivas del mercado y lo hace de manera excepcional con retratos pintados a mano ambientadas en el siglo XX.
Se trata de la más reciente campaña de la marca firmada por el talentoso fotógrafo Steven Meisel quien se ha empeñado en darle un toque vintage a uno de los rostros más bellos de la actualidad logran detener el tiempo en una serie de retratos digitales que simulan pinceladas y detienen el tiempo en un anacronismo intencionado.
De la colección de bolsos destacan dos diseños como protagonistas los modelos Wander y Arcadie diseñados en ante o en cuero; en colores que van del fucsia al pistacho pasando por el mocha mouse del 2025 que tiene todo el chance de hacer lo que quiera incluso en primavera y no tiene porque dar explicaciones si este año, es su año.
En una evidente intención nostálgica, Steve Meisel ha retocado los retratos digitalmente para simular las características pinceladas de las inmortales pinturas al óleo que le aportan textura, paciencia y mucho detalle a la obra, es decir, en la campaña de esta colección protagonizada por Gigi Hadid no existe el tiempo, ni mucho menos la prisa como una exigencia de la vida digital contemporánea que ha metido en tantos líos deontológicos al arte moderno.
Como si se tratara de una curaduría de museo, la campaña no sólo exige atención, también exige la interacción contemplativa. A cargo del estilismo de Gigi estuvo Lotta Volkova y la dirección creativa va firmada por Edward Quarmby, es una campaña que sabe lo que quiere decir sin necesidad de levantar la voz, de hecho, para entenderla es necesario el silencio y la paciencia de quienes disfrutan el arte en su máxima expresión.