Una vez más, Hermès nos cautivó durante la Paris Fashion Week esta vez con una apuesta infalible y fiel a su tradición de cuero. Se trata de una tendencia ideal para el clima de primavera-verano: minishorts con botas altas, una de las principales apuestas de la maison durante este último festival de la moda.
Compuesto por poco más de 60 looks, el desfile de Hermès reinventó su romance con el cuero. La propuesta de Nadège Vanhee es, justamente, la renovación de conceptos para ofrecer propuestas remasterizadas en looks estructurados para mujeres jóvenes.
Aunque los minishorts con botas altas fue la propuesta fuerte del desfile, también hubo otras destacadas como el regreso de las chamarras bomber con especial énfasis en las texturas y los colores y es que, si hay una maison que sabe emplear el color de forma magistral, esa es Hermès quien en esta ocasión ha apostado por look monocormáticos en tonalidades negro, gris, marrón y verde pistache.
Por supuesto, también hubo una fuerte presencia de accesorios donde, como ya sabemos, los bolsos guardan un lugar especial de Hermès quien presentó baúles miniaturizados que se usaron como carteras o bolsos de hombro y de inmediato llamaron la atención de todos los asistentes.
Aunque Hermès siempre es garantía de lujo y sofisticación, esta nueva propuesta dirigida a un público joven llama la atención porque busca ser sensual sin perder su esencia como una firma de lujo y lo que pretende ser una propuesta arriesgada, en realidad es una muestra de que, cuando se trata de Hermès todo es posible pues logra el equilibrio perfecto entre frescura y tradición.